
Miguel de Pablo cumplió lo prometido ante la injusta exclusión de la feria taurina de Valdemorillo, vistiéndose de luces las tres tardes del ciclo, junto a su apoderado Jesús Pérez “El Madrileño” a las puertas de la Candelaria para revindicar un sitio justo en el toreo. Muchos fueron los aficionados que se acercaron a apoyar al diestro, al igual que profesionales del toreo de la talla de El Boni, El Chano, Uceda Leal, José Luis Carabias… o los periodistas Carmelo López, Sixto Naranjo, Chapo Apauloza, nuestros compañeros del programa radiofónico García Moreno y José Antonio Mancha…
Una reivindicación que pedía dignidad para el torero y a la que el diestro describía a su fin de la siguiente manera.
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